¿Cómo saber si la caja de cambios automática está dañada?

5 síntomas de una transmisión automática dañada Falta de contestación. La vacilación o la negativa absoluta a mudar a la marcha adecuada es un signo revelador de inconvenientes de transmisión. Suena extraño. Fugas de líquido. Fragancia a quemado. No comienza.

La transmisión es crítica para el desempeño de su vehículo. Es un sistema mecánico complejo que trasfiere la capacidad del motor de manera directa al eje de transmisión y las ruedas. Aun si efectúa un cuidado regular en su vehículo, todavía existe la oportunidad de que halle inconvenientes de transmisión. De año en año, una cantidad enorme de automóviles nuevos van de factoría con transmisiones imperfectas.

Probables causas de daños en la caja de cambios automática

Advertir un exceso de revoluciones, sentir un tirón o sentir que el vehículo no da toda la capacidad que habría de ser son solo ciertas ocasiones reconocibles a lo largo de la conducción que, merced a un óptimo diagnóstico, tenemos la posibilidad de detectar para impedir probables daños en la transmisión automática.

Un mal cuidado de la caja, adjuntado con una mala conducción, son 2 causantes recurrentes que siempre y en todo momento están relacionados con su deterioro.

Fragancia a quemado

Fragancia a quemado

En el momento en que comience a olisquear a quemado, asegúrese de que sea un mal síntoma. Si el fragancia a quemado sucede en la transmisión, es una bandera roja. Lo mucho más posible es que logre arreglar la falla con una descarga de la transmisión; no obstante, si el inconveniente persiste, se precisa con urgencia una reconstrucción o remplazo con una exclusiva transmisión.

¿Cuáles son los errores más habituales de una caja de cambios automática?

1. En el momento en que escucha el cambio de marcha, la transmisión cambia a todas y cada una de las marchas.
2. Mala aceleración a bajas velocidades.
3. La caja de cambios no cambia de marcha.
4. No hace cambios de agilidad y es contrarrestado.

Mira la transmisión automática cuando menos una vez por año con tu técnico de seguridad.Si observas pérdidas de aceite o cambios bruscos de agilidad, no pierdas tiempo y transporta el vehículo al taller en el instante.